Descargue sus tensiones internas.
Nuestro baño alcalino está compuesto por numerosos minerales que nuestro cuerpo necesita para mantener su elasticidad.
Debido a la reacción alcalina durante el baño y a la fricción recomendada con un cepillo o paño para la piel, la película superficial de la piel y el callo se aflojan. Las glándulas sebáceas se estimulan y favorecen la relubricación de la piel. El resultado es que no está escurrido y seco, como ocurre con los baños de burbujas normales, sino que es aterciopelado y, por tanto, también aumenta el bienestar general.
Sumérgete en un baño completo alcalino y “descarga” tus tensiones internas.
También puede utilizar nuestra sal alcalina como baño de pies o de manos, en la ducha como peeling, en calcetines de sal o como envoltura.
La vida en crecimiento en el vientre materno nos muestra el cuidado ideal del cuerpo. Es tan alcalino como el líquido amniótico de la futura madre, que debe tener un valor de pH alcalino de 8 a 8,5. El ejemplo más conocido de cuidado alcalino es el jabón de cuajada (valor de pH 8,5-9,0). Las personas con problemas de piel que vuelven a utilizar el jabón de cuajada aprecian su efecto suave y de alivio de los picores.
El cuidado corporal alcalino significa una limpieza suave y una mejor renovación de la piel al eliminar a fondo las capas de piel vieja. Por desgracia, este conocimiento se ha ido olvidando cada vez más en las últimas décadas. El cuidado corporal habitual tiene un valor de pH de, por ejemplo, 5,0- 5,5 (valor de pH ácido)) para los geles de ducha. La función del manto ácido se ha discutido durante muchas décadas. Sin embargo, los hallazgos clásicos sobre la importancia del valor del pH ácido para la piel están siendo refutados cada vez más por estudios bioquímicos y de biología molecular más recientes.
Pregunte por nuestro gel de ducha o champú alcalino de eficacia probada.
Ingredientes: sal marina, bicarbonato de sodio, carbonato de sodio, minerales naturales